Sólo sé que no me quiso, que nunca le importé.
Le di alas pero él siempre creyó que yo era una jaula.
Le di un amor que no correspondió.
Le di mis ojos viéndolo siempre con sinceridad
Viví unos meses el vacío y la soledad.
Perdoné y justifiqué sus mentiras.
Me conformé con sus migajas hechas palabras.
Disfruté esos besos de minutos que parecieron segundos.
Nunca vi en alguien tanta oportunidad.
Con él quería crecer, experimentar el amor.
Por eso tanto me esforcé, pero no aguanté.
Un día desde un mensaje le pedí sinceridad.
En persona nunca pude decírselo.
Creo que por primera vez fue sincero....
No me volvió a buscar.