En mi vida ha imperado más la razón que el corazón y no me ha ido tan mal, aunque es cierto que cuando es así cuesta mucho hacer entender lo otro, pero no siempre es bueno hacer las cosas por impulso, y sobre todo en una edad donde las cosas del amor fluyen como manantiales, y algunas veces eso me costo unas cuantas lagrimas, pero sigo estando aquí y aunque sigo pensando que la razón es lo mejor no os miento que cuando me llegan fuerte al corazón no siempre digo que no jejejeje
|