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Puede parecerte sexy al principio, pero lo cierto es que la sugilación (más conocida como chupetón o chupón) no deja de ser una lesión que puede resultar dañina y hasta dolorosa.
Para aquellos novatos que aún no saben de qué estamos hablando, nos referimos a esos hematomas (o moretones) que suelen aparecer en el cuello o en otras zonas del cuerpo luego de que sean succionadas fuertemente con la boca. Están relacionados con el juego previo al acto sexual y algunos amantes incluso llegan a solicitar que se los dejen, como si de una “marca” amorosa se tratase.
Pero los chupetones tardan varios días en desaparecer de manera natural, y en ocasiones llegan a convertirse en un problema importante para quien lo lleva: pueden llevar a fuertes discusiones con la familia en el caso de los adolescentes, o con la pareja si el otro no está convencido de haber sido él mismo el autor del chupetón… Por eso, si ya es demasiado tarde para impedir que se forme el chupetón y sientes deseos de borrarlo como sea, presta atención a estos consejos.
Trucos caseros para quitarse un chupetón
Colocarse hielo sobre el chupetón es una forma de impedir que se junte demasiada sangre sobre la zona, y puede bajar un poco la inflamación. No obstante, has de saber que el hielo directamente colocado sobre la piel puede producir quemaduras. Lo mejor es colocar el cubito de hielo dentro de una bolsa para evitar que se apoye directamente sobre el chupetón. Por cierto, el hielo también es bueno para prevenir la formación del chupetón, pero debe aplicarse de inmediato. También funciona si en lugar de hielo se aplica el frío poniendo sobre el chupetón una cuchara que haya sido previamente colocada en el refrigerador durante un par de horas.
Otras recetas caseras (cuya efectividad, sin embargo, no podemos menos que poner en duda) incluyen frotar al chupetón con una moneda o con un peine, aplicar pasta de dientes sobre el mismo –cuidado que arde-, o bien borrártelo con el borrador del lápiz (alguien sugirió esto pero, ¿está demostrado que funcione?).
Finalmente, si el chupetón es muy grande o muy doloroso, puedes consultar en una farmacia de confianza por alguna crema que sirva para eliminar hematomas.
Escondiendo la evidencia
Por supuesto que si el chupetón está en el cuello es más visible y difícil de ocultar que si está en otras partes del cuerpo que la ropa habitualmente cubre. De todas maneras, puedes optar por esconderlo con alguno de estos métodos:
- Tapándolo con maquillaje (pero vigílatelo cada tanto, pues el polvo se corre).
- Dependiendo del color del chupetón, existen diferentes colores de maquillaje que serán los adecuados para cada ocasión. Aplica corrector verde para cubrir un chupetón rojo; si es morado, aplica un corrector amarillo; si ya adoptó un tono azulado, aplica corrector naranja; el corrector rosado es ideal para un chupetón marrón. Luego debes aplicar base y polvos, sellar rociando agua con spray, y dejar secar al aire libre.
- Soluciones más obvias incluyen soltarte el cabello, atarte un pañuelo, una chalina o una bufanda alrededor del cuello, usar polera de cuello alto o un collar grande que lo tape (fijándolo al lugar del chupetón con un poquito de cinta adhesiva).
De todas maneras, para evitar este tipo de situaciones y ahorrarte una lesión dolorosa, la próxima vez piénsalo dos veces antes de permitirle a tu pareja que te haga un chupetón. También puedes ponerte en el lugar del otro y expresar tu amor y tu deseo de maneras menos dañinas y antiestéticas.
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