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Hay quienes dicen que el verano es la estación más romántica del año, aún más que la primavera, que con sus alergias y su tiempo inestable no nos seduce para salir todos los días. En cambio, el verano nos muestra cuerpos atractivos muy ligeros de ropa, chicas y chicos dispuestos a divertirse, largas horas de sol y playa y noches de tragos y baile. Cuando estamos de vacaciones, por lo general estamos de mejor humor para ligar, o bien para ser seducidos. Por ello se producen con tanta frecuencia los famosos “amores de verano” (ya sea que se terminen junto con la temporada estival, o bien se prolonguen en el regreso a la vida de siempre). Seguramente te estarás preguntando: “Suena bien, pero, ¿cómo consigo uno de ésos?”
Pues bien, estás de parabienes. Si vas a pasar tu próximo veraneo a orillas del mar, descubrirás que la playa es un excelente lugar para ligar, y puedes lograr maravillas tan sólo prestando atención a los siguientes consejos.
Siéntete cómod@ contigo mism@
Todos tenemos algún aspecto de nuestro físico que nos avergüenza. Pero, si para colmo de males lo único que te separa del mundo son unos escasos milímetros de bañador, podemos sentirnos más que expuestos. Mírate al espejo antes de bajar a la playa, y resalta ante ti tus rasgos más positivos. Es muy importante aceptarse a uno mismo tal cual es y demostrar comodidad con el propio cuerpo ya que, de lo contrario, tu propia inseguridad te delatará frente a la persona que intentas seducir y los efectos producidos distarán de ser los deseados.
Espera a encontrarte a solas
Haz echado el ojo a un/a vecin@ de sombrilla en la playa. Pero se encuentra todo el tiempo rodead@ de sus amigos y amigas o –peor aún- de sus padres. Pues no es momento para intentar nada: espera a que esté a solas, ya sea cuando va a caminar por la orilla del mar, o bien cuando sus amigos están ocupados en un juego de pelota playero, y sus padres aún no han llegado.
No seas demasiado obvi@
Más allá de que tus intenciones quedarán expuestas en cuanto le dirijas la palabra, no intentes ligar con alguien de una forma tan evidente como pedirle que te pase bronceador por la espalda. Sólo conseguirás que se le escape una carcajada, a menos que esté tan desesperad@ como tú. Es preferible iniciar la conversación con algo como: “Hoy es mi primer día de veraneo, ¿conoces algún lugar divertido para recomendarme para salir más tarde con mis amigos?”. Si te contesta y se involucra en la conversación, puedes terminar por proponerle una salida grupal.
Actividades para compartir
Si ambos están con un grupo de amigos, las perspectivas de ligar se incrementan. Habiendo padres de por medio, la situación se complica. Sin embargo, siempre puedes proponerle una inocente caminata por la playa, invitarl@ con un helado o un refresco, o bien compartir una partida de naipes. Con los amigos de ambos, una buena idea es organizar un partido de voleibol en la playa, o bien darse todos una zambullida en el mar. Muéstrate como una persona con ganas de divertirte y seguramente le contagiarás tu entusiasmo.
Cualquier lugar es bueno para ligar. Pero, si la perspectiva incluye días de mar, sol y arena, todavía mejor.
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